Si tengo que ser sincera y confesar, lo acepto: soy adicta al café desde hace más de tres meses, me gusta fantasear cosas estupidas en medio de la noche… hablo sola durante el día. Me gusta llorar y lejos de sufrir, es mi mejor actuación.
Me encanta decirle a mamá “te amo” e imaginar que al llegar a casa estará mi hermano sentado en el computador. Adoro a los gatos y sólo una sonrisa me puede conquistar.
Confieso, y es mi mejor pecado, como más de 10 veces durante el día y mamá dice que no me alimento bien. No me gustan las mentiras y mucho menos los juegos infantiles… aunque miento diariamente. No creo en la suerte y menos en el destino, leo el horóscopo pero creo en Dios.
Amo como soy pero quiero cambiar. Necesito tiempo para pensar. Me gusta el amor pero mucho más, las peleas en pareja. Puedo cambiar de parecer pero nunca veras mi orgullo desvanecer.
Me encantan las tortas, odio el chocolate puro y adoro las frutillas. No me gusta cocinar aunque muchas veces me dan antojos “espaciales”. Me gusta dormir y perder el tiempo. Podría estar todo el día mirando tus ojos, aunque después me arrepentiría porque no te robe un beso. Podría prometer el cielo pero te lo quitaría luego.
Si es tiempo de confesar, no salgo de casa sin reloj, odio mi perfecta nariz y deseo ser otra. Me gustan las matemáticas y los cálculos, aunque me gustaría ser mejor en embriología.
Me gusta el transantiago y odio como me veo con mi parka azul. Siempre duermo con mi peluche preferido y abro un poco mi cortina durante la noche para poder tener dominio perfecto de mi pieza. Temo a los espíritus y a las cosas que no puedo ver.
Confieso que escucho música “pop-americana” odiada por multitudes sólo cuando estoy feliz y en los momentos tristes, coloco un poco de rock. Me gusta reír y que las personas de mi “mundo” estén felices.
Siempre quiero el papel principal y si no lo tengo, haré que otra lo pierda. Me gusta competir y siempre ganar, buscar la cima de la cumbre más alta y colocar mi nombre junto a ella.
Deseo la “paz mundial” y que los niños dejen de llorar. Quiero un mundo más concentrado en las masas y menos “comunista”.
Admiro la valentía de las “minorías” y apoyo su causa, mientras no perjudique la mía. Soy “bipolar” continuamente y le doy un poco de sabor a mi vida, cada día.
Me despierto a las 6 de la mañana y deseo hacer nada. Mi cuerpo tiene marcas que no podré borrar y no me gusta como soy.
Si debo confesar, ante ti, digo que soy una pecadora y de las mejores, mentir es parte de mí y más lo es, el manipular. Soy egoísta y muy enamoradiza. Siempre deseo lo prohibido y una vez que sea mío, ya no me interesa. Caprichosa por esencia, no logro alegrarme por triunfos ajenos.
Me encanta el color café y el verde. Odio el hecho de no poder conquistar tu corazón y que sólo pases por aquí a colocar tu comentario. Me carga esperar… pero me encanta que esperes. Mi olor favorito es el que queda después de caída la lluvia. Mi día perfecto es uno de invierno y me molesta el sol.
La hermosura la encuentro en la oscuridad, así como el arte en la estupidez.
En fin… aquí un trozo de mi… ahora te toca a ti.
Me encanta decirle a mamá “te amo” e imaginar que al llegar a casa estará mi hermano sentado en el computador. Adoro a los gatos y sólo una sonrisa me puede conquistar.
Confieso, y es mi mejor pecado, como más de 10 veces durante el día y mamá dice que no me alimento bien. No me gustan las mentiras y mucho menos los juegos infantiles… aunque miento diariamente. No creo en la suerte y menos en el destino, leo el horóscopo pero creo en Dios.
Amo como soy pero quiero cambiar. Necesito tiempo para pensar. Me gusta el amor pero mucho más, las peleas en pareja. Puedo cambiar de parecer pero nunca veras mi orgullo desvanecer.
Me encantan las tortas, odio el chocolate puro y adoro las frutillas. No me gusta cocinar aunque muchas veces me dan antojos “espaciales”. Me gusta dormir y perder el tiempo. Podría estar todo el día mirando tus ojos, aunque después me arrepentiría porque no te robe un beso. Podría prometer el cielo pero te lo quitaría luego.
Si es tiempo de confesar, no salgo de casa sin reloj, odio mi perfecta nariz y deseo ser otra. Me gustan las matemáticas y los cálculos, aunque me gustaría ser mejor en embriología.
Me gusta el transantiago y odio como me veo con mi parka azul. Siempre duermo con mi peluche preferido y abro un poco mi cortina durante la noche para poder tener dominio perfecto de mi pieza. Temo a los espíritus y a las cosas que no puedo ver.
Confieso que escucho música “pop-americana” odiada por multitudes sólo cuando estoy feliz y en los momentos tristes, coloco un poco de rock. Me gusta reír y que las personas de mi “mundo” estén felices.
Siempre quiero el papel principal y si no lo tengo, haré que otra lo pierda. Me gusta competir y siempre ganar, buscar la cima de la cumbre más alta y colocar mi nombre junto a ella.
Deseo la “paz mundial” y que los niños dejen de llorar. Quiero un mundo más concentrado en las masas y menos “comunista”.
Admiro la valentía de las “minorías” y apoyo su causa, mientras no perjudique la mía. Soy “bipolar” continuamente y le doy un poco de sabor a mi vida, cada día.
Me despierto a las 6 de la mañana y deseo hacer nada. Mi cuerpo tiene marcas que no podré borrar y no me gusta como soy.
Si debo confesar, ante ti, digo que soy una pecadora y de las mejores, mentir es parte de mí y más lo es, el manipular. Soy egoísta y muy enamoradiza. Siempre deseo lo prohibido y una vez que sea mío, ya no me interesa. Caprichosa por esencia, no logro alegrarme por triunfos ajenos.
Me encanta el color café y el verde. Odio el hecho de no poder conquistar tu corazón y que sólo pases por aquí a colocar tu comentario. Me carga esperar… pero me encanta que esperes. Mi olor favorito es el que queda después de caída la lluvia. Mi día perfecto es uno de invierno y me molesta el sol.
La hermosura la encuentro en la oscuridad, así como el arte en la estupidez.
En fin… aquí un trozo de mi… ahora te toca a ti.
