Estoy un poco cansada de rendir cuentas a extraños, que sólo buscan comentar mis historias exagerando sus detalles. Me aburrí del cinismo, abundante en Chile, que traspasa fronteras y murallas. Agote mis recursos para defender a mi alma de amenazas de destrucción total porque ya no me detengo a verlas, prefiero pasar como si no existieran.
Borre todo contenido externo a mis intereses. Coloque una línea gruesa y oscura sobre nombres, teléfonos o direcciones que no quiero guardar. Saque los papeles colgados en mi escritorio para no tener que recordar cosas “que algún día tendré que hacer”. Traje a mi presente momentos bochornosos por última vez. Tome mi taza de café diaria. Leí un poco mi “comentado” libro.
Celebre, en la soledad, lo lejos que he llegado sólo con mi corazón. Deje de soñar para dejar de crear ilusiones pasajeras, que atormentan. Respiro una cuantas veces por minuto, para que la sangre fluya caliente y veloz. El día es lento y estupido, nada me detiene, nada me apura.
El futuro me da lo mismo, porque no puedo vivir dos cosas a la vez. Las amistades que ya deje afuera, seguirán ahí. Las malas “vibras” no podrán entrar porque no necesito “pensar”, sólo actuar. No me arrepentiré de nada porque todo lo quise hacer. Aceptaré mi cuerpo porque es el único que tengo. Ya no deseo ser como esa o como aquella, sólo el “yo” vive en mi mundo y es eso lo que deseo.
No necesito colocar “sonrisas” donde no existen, ya no quiero envenenarme con personas que no lo valen. Miraré a lo ojos sin dar respuestas, no deseo que las sepas. Jugaré mi juego, sin ver tus reglas. Y por último, caminaré directo a lo que quiero para que mi cabeza no se conecte con mi corazón en la frase: “no perdías nada con intentarlo”.
Borre todo contenido externo a mis intereses. Coloque una línea gruesa y oscura sobre nombres, teléfonos o direcciones que no quiero guardar. Saque los papeles colgados en mi escritorio para no tener que recordar cosas “que algún día tendré que hacer”. Traje a mi presente momentos bochornosos por última vez. Tome mi taza de café diaria. Leí un poco mi “comentado” libro.
Celebre, en la soledad, lo lejos que he llegado sólo con mi corazón. Deje de soñar para dejar de crear ilusiones pasajeras, que atormentan. Respiro una cuantas veces por minuto, para que la sangre fluya caliente y veloz. El día es lento y estupido, nada me detiene, nada me apura.
El futuro me da lo mismo, porque no puedo vivir dos cosas a la vez. Las amistades que ya deje afuera, seguirán ahí. Las malas “vibras” no podrán entrar porque no necesito “pensar”, sólo actuar. No me arrepentiré de nada porque todo lo quise hacer. Aceptaré mi cuerpo porque es el único que tengo. Ya no deseo ser como esa o como aquella, sólo el “yo” vive en mi mundo y es eso lo que deseo.
No necesito colocar “sonrisas” donde no existen, ya no quiero envenenarme con personas que no lo valen. Miraré a lo ojos sin dar respuestas, no deseo que las sepas. Jugaré mi juego, sin ver tus reglas. Y por último, caminaré directo a lo que quiero para que mi cabeza no se conecte con mi corazón en la frase: “no perdías nada con intentarlo”.
Lo tengo todo
Vivo cada día nuevas cosas
El amor llega
La soledad se esconde
Soy feliz
